El campeón nacional de las 147 libras dialogó con Segundos Afuera y habló de todo: cómo llega a la pelea del sábado, su derrota en la eliminatoria del título del mundo, el debut de su esposa en el boxeo rentado y la desvinculación con el promotor de Junín.
Por Andrés Mooney
Los críticos de boxeo, en ocasiones, tienen una tarea simple: se sientan, observan, y si no les gusta, ponen el grito en el cielo. Así de fácil es, para la prensa especializada, machacar la carrera de un deportista. Y Saldivia es uno de esos que genera adhesión pero con un signo interrogatorio. Esa pegada capaz de acabar con cualquiera, la velocidad con que combina sus golpes, y la buena línea boxística, son resaltadas por los amantes del púgil de Comodoro Rivadavia. El vendaval de manos por momentos sin eficacia y su defensa que aún no ha sido exigida al máximo (a pesar de haber perdido en dos oportunidades por la vía del cloroformo), son cuestionadas todavía por los que miran de reojo al campeón argentino de los welter. En su chance internacional grande, no tuvo suerte. Este año, va por la revancha con título mundial incluido y bajo el ala de un nuevo promotor: Osvaldo Rivero.
- ¿Qué sabés de tu rival del sábado, el uruguayo Néstor Faccio?
Sé muy poco, pero sé que combatió afuera, ha tenido una chance en Alemania por un título mundial juvenil y terminó en decisión unánime para el local. Así que se ve que viene bien. No pudimos ver videos, pero estamos tranquilos: no va a ser la primera vez que nos toque combatir frente a un rival que no sabemos cómo se mueve.
- ¿Con quién estuviste trabajando para este combate?
Estuve entrenando y guanteando con un mediano de Buenos Aires que está radicado en Santa Cruz y está entrenando junto con nosotros, Pedro Iván Vallejos. Y con Nicolás López, que debuta el sábado y creo que está en pleno apogeo, trabajando a full, así que hicimos un muy buen trabajo para este nuevo compromiso.
- Uno se había ilusionado con la posibilidad de una pelea con Sebastián Luján y finalmente no se hizo, ¿Por qué?
Pasaron muchas cosas que uno no ventila en los medios, que queda entre el promotor y nosotros. De mi parte había hecho todo el trabajo para pelear con Luján, pero en un momento se había confirmado acá en mi casa, en Comodoro y la gente quedó defraudada por no haberlo hecho. Yo de mi parte estaba decidido a combatir donde sea, pero había cosas que no me convencían: se habló de ir a combatir a Rosario, a la casa de Luján siendo yo el campeón. A parte de eso, cosas que a mí no me gustaron y prefiero no ventilarlas, problemitas con el promotor pero ojo: estoy muy agradecido de Mario Arano.
- ¿Es una presión extra el debut con nuevo manager?
No, el ring es el mismo, la gente que me sigue acá en Comodoro, como siempre, es la misma. Uno necesitaba continuidad y el "Negro" Rivero nos la da, así que hay que preocuparse por combatir nomás
- ¿Qué pasó en tu última pelea con el marroquí Said Ouali? ¿Mala suerte?
Somos de los que creemos en el trabajo, por ahí es obvio que uno debe tener una cuotita de suerte siempre, pero creemos siempre en el trabajo y lo cierto es que allá no trabajamos del todo bien. Primero fue desesperación lo que me pasó, no quería llegar a los rounds pactados porque había tenido problemas con el peso como jamás tuve. Pensaba nomás en definir la pelea, cosa que nunca hago y bueno, tuve la suerte de conectarlo a los 12 segundos, se dio el knock down, se levantó y fue desesperación mía para definir cuando el marroquí estaba todavía en pelea.
- ¿Estuviste mal físicamente porque te faltó trabajo?
En la preparación física ustedes saben yo me preparo al 100% y trato de entrenarme para dejar todo arriba del cuadrilátero. Cometimos un error en la alimentación, tuvimos cerca de 50 días comiendo cualquier cosa, que no estamos acostumbrados y esa fue una de las cuestiones que me llevó a tener 5 ó 6 lesiones como nunca había tenido. Lo grave fue el peso, pelear con la balanza como jamás lo había hecho. Fue una experiencia dura pero de esto se aprende y me dejó mucho.
- ¿Después de esta pelea qué se viene?
Uno desde que empezó en esto, lo que quiere es pelear un título del mundo. Ese es mi objetivo, más allá de ser campeón argentino y defender a muerte mi cinturón contra quien sea. Pero este año quiero ir por el campeonato mundial.
- Un pajarito me contó que el sábado debuta como boxeadora profesional tu esposa, ¿es cierto?
Debuta el mismo sábado, hace su primera pelea. La veo muy bien, con muchas ganas, entusiasmada, y eso es fundamental a parte de las condiciones; así que seguro va a hacer una gran pelea y se viene una gran carrera para ella.
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