En una prolija organización del triple campeón mundial Santos Laciar, el Polideportivo General Paz vivió una noche de melancolía. “Para mí siempre será Redes Cordobesas este estadio”, confesaba sin ocultar su nostalgia nuestro compañero Claudio Bedirián. “Acá hice mis primeras peleas de amateur. ¿Sabés cómo se llenaba esto? ¡Todos los viernes!”, narraba el árbitro Víctor Correa. Es que fue ahí, en “24 y Roma”, donde una página grande del boxeo cordobés se escribió. Y por eso el vecino se acercó. Por lo que vivió, por “Falucho”, por el boxeo.
“El Polo” sabe
Pero el plato fuerte era Mauricio Casedas (5-0-0 81,500 Kg.), un ignoto boxeador del que no había mucha información en la previa. Hacía su sexta pelea como profesional, habiendo ganado sus anteriores cinco por puntos.
El pupilo de Ramón Arévalo se llevó claramente las cuatro vueltas. Con un boxeo ordenado, demostró que a pesar de su noviciado tiene una correcta enseñanza. Envía los golpes para lastimar, no hay Jab de estudio: todos son potentes directos. Pero la experiencia en sobrevivir sobre el ring -ayudado por los 80 Kg. que pesó e hicieron que el radicado en Córdoba subiera de peso- de Leonardo Ontiveros (0-6-1 80,000 Kg.) y el debut en nuestra ciudad de Casedas, ayudaron a que la pelea terminase en las tarjetas. “El Polo” deberá boxear más cómodo, soltar los golpes con mayor velocidad y no anticipar la maniobra. Anoche fue un monólogo de Casedas que, sin dudas, aprobó el examen con creces.
Los jueces dictaminaron lo siguiente: Héctor Morón 40 - 37, Adolfo Cassaro 40 - 36 y Juan Carlos García 40 - 36
Los jueces dictaminaron lo siguiente: Héctor Morón 40 - 37, Adolfo Cassaro 40 - 36 y Juan Carlos García 40 - 36
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