La esperanza de Héctor Saldivia se había renovado. El
horizonte le proponía una estadía en Oxnard con el Team Maravilla, una buena
preparación en manos de Pablo Sarmiento, coach del propio Sergio Martínez, y
una próspera eliminatoria mundialista que no tardaría demasiado en llegar. Sin
embargo, de un día para el otro y cuando todo marchaba viento en popa, el Tigre
tomó la decisión de irse. Ante este panorama, Robinson Zamora, quien siempre
fue su entrenador, acusó que "lo maltrataron" en California. El
Hueso, mano a mano con Olé, dio su versión de lo que realmente ocurrió.
"Esto no fue así. Saldivia decidió irse por sí mismo.
El problema fue por su novia. Íbamos a correr a la montaña y ella estaba ahí,
íbamos a hacer pesas a las 5.00 y ella estaba ahí, íbamos a guantear y ella
estaba ahí... Entonces, como yo no entreno mujeres, le dije que no podía seguir
llevándola a cada entrenamiento porque no se concentraba. Incluso Fortuna
(Javier, un dominicano que es parte del equipo), un pluma, lo noqueó en un
sparring por estar distraído. Lo único que se le pidió fue eso y él respondió
que no porque ella era su apoyo. Le contesté que es cierto, como pasa con todos
los boxeadores que tenemos acá, pero sus mujeres e hijos no están todo el
tiempo con ellos", soltó Sarmiento.
Pero eso no fue todo. En declaraciones al diario El
Patagónico, Zamora afirmó que Israel Pérez, un peso ligero que también se
incorporó recientemente al team, había sido desafectado. El Hueso desmintió
esta versión: "Cachito está acá, entrenándose con nosotros como lo viene
haciendo hace meses". Pese al malentendido, Sarmiento destacó el
profesionalismo de Saldivia. "El chico trabajaba muy bien, con mucho
empeño. Es uno de los que más sacrificio le ponía. Pero a mí, que me dedico a
esto hace mucho tiempo, no me van a venir a imponer reglas", comentó sobre
el Tigre, quien ahora se fue a Los Ángeles.
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